martes, 25 de marzo de 2014

Sobreviviente

Sobreviviente soy de esta guerra llana y muda,
sobreviviente del griterío de la muerte,
de las voces que encontraron tumbas,
de la sangre seca y derramada.

Sobreviviente del amor y del deseo,
sobreviviente del dolor  y de la tumba,
del destierro perseguido y enlutado,
de los ojos que se callan,
de los labios que enmudecen.

Sobreviviente del desazón y de la locura,
de la calma aniquilada,
de los libros tristes y empolvados,
de la palabra secuestrada,
de los psiquiátricos y de la cárcel,
del pozo profundo de la duda.

Sobreviviente del naufragio de  la vida,
de las olas  del tiempo,
 de la tempestad del mar,
de  los huesos del desierto,
de la  tierra estéril y de la sequía.

Sobreviviente de la voz ronca del violín,
de las notas de algún canto,
 del sonido de la noche,
del espanto de estar vivo.

Sobreviviente de la calumnia,
de la soledad del exilio,
de la compañía del viento,
de los murmullos de los muertos,
de los susurros de los vivos.

Me sobrevive al fin del mundo
esta  mi voz de poeta,
nuestro himno revolucionario,
el suspiro de tu recuerdo,
el llanto insurgente
este cabalgar desnuda
hacia donde tu horizonte
por amarte tanto y tanto.






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