Mi corazón está herido por
vidrios
rotos que torturan mi alma,
todas mis ilusiones están amenazadas
¡Soy fuerte, muy fuerte! me lo digo
en silencio.
Tal vez para convencerme,
tal vez para invocar al sosiego
más llegan la horas de profundas soledades
y quiero perderme en el sueño.
Para que nada ni nadie me hunda
para no escuchar mis ecos
para que no me duelas como me estas
doliendo
para no sentirte dentro de mis
pensamientos.
Doy vueltas en la cama,
ese cobertor no es suficiente para
abrigar mis miedos,
los colores ya no bastan para creer
en el cielo
mis sueños de noche me despiertan sin
consuelo.
De niña tenía miedo al abandono
miedo en las pesadillas
miedo del no retorno
miedo a quedarme sola.
cuando me supe alma solitaria
y me acostumbre al sonido
de mi voz en mis adentros
luego me cerré al mundo.
Para no seguir queriendo
para no creer en nada
para no confiar en nadie
para protegerme de todos.
Luego hubo en rencuentro en la
lejanía
y retar al mundo era la osadía
¡Que me odiaran todos
si tú me querías!
¡Que me odiaran todos si tú me
querías!
Y te di mi juventud doliente
y sacrifiqué mis ganas
y sacrifiqué mi sangre
y ofrendé mis años
y te consagré mis sueños
encontré un espacio en el mundo.
Y ahora temblorosa
llorando hacia adentro
Y ahora callada
hablando en silencio
y ahora llorosa
por falsos juramentos.
No soportaría una prorroga más
¡Que las calles no me quieren ver
llorar!
¡Que el sol encendido no me va a
consolar!
¡Que no tendré brazos en cuales
arrojarme!
¡Que no tendré besos en que refugiarme!
No jueguen conmigo si van dejarme.
No hay comentarios:
Publicar un comentario