lunes, 11 de marzo de 2013

Allá, lejos


Allá, lejos
Voy siguiéndote los pasos,
¡Qué peligroso es ser poeta
porque uno siempre dice la verdad!
y no me importa, yo te sigo y me leen.

Y  sigo tu sombra
 por veredas de olivo
y sigo tu silencio
como si fuera música.

Sé que estás en mi matria
y estás aquí porque me amas,
vives por mí en el encierro
como un anónimo, un fugitivo.

Y me extrañas, allá, lejos
pero te llegan mis pensamientos
y a veces mis insoportables silencios
te conformas y sonríes.

Porque guardas esperanzas
y mis fotos te acompañan,
floreces en mis poemas
como la primavera, sin penas.

Sabiéndote revolucionario por el destino
tomas una taza de café
y  sorbes la fe mientras
contemplas desde tu ventana el atardecer.

Y despiertas con furia y con fuego…
entre nosotros hay un hasta luego
porque nos amamos,  porque nos amamos
y me sabes tuya aunque lejos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario