Ahora que soy piedra no me turba el dolor, no me sobresalto con pesadillas, no me levantó con ilusiones, no me hiere la vida, no le temo a la muerte, mi tristeza ha dejado un sabor salado a mis poros y el frío es mi constante compañero, no necesito amigos que me prometan la libertad y que me dejen en la prisión para darme cuenta de que siempre he estado sola, no tengo historia ni tiempo, ni nombre, ni memoria, los sueños se me han evaporado con el sol y el agua del río que golpea mis bordes son como un latido sin vida, no sé si me has enterrado o me has desterrado y que más da? sigo siendo roca rodante soy incapaz de sentir que han doblegado mi vida y han enterrado una espada en mi corazón, no tengo que preocuparme porque sanen mis heridas, porque soy muy fuerte e inquebrantable, pero me enternece el musgo que a mi lado enverdece el paisaje y me domina el milagro de una jacarnda recién nacida, y me siento responsable del daño que he causado a la tierra por existir, yo no necesito de amor para crecer porque nunca he sabido que se siente sentir abandono y no sé que es desolación, ahora que soy roca creo que seré más feliz que cuando era agua.
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