Gracias a la vida que me ha dado tanto Me ha dado la marcha de mis pies cansados Con ellos anduve ciudades y charcos Playas y desiertos, montañas y llanos Y la casa tuya, tu calle y tu patio...
Cuando miro el fruto del cerebro humano Cuando miro el bueno tan lejos del malo CUANDO MIRO EL FONDO DE TUS OJOS CLAROS
Yo sé dónde apareces diariamente, conozco el sitio exacto y la hora precisa en que tu rostro enciende su hermosura. Aprendí de memoria tu órbita celeste, el instante glorioso en que brillas más cerca de mis ojos y también el momento en que huyendo me robas tu semblante.
Gracias a la vida que me ha dado tanto
ResponderEliminarMe ha dado la marcha de mis pies cansados
Con ellos anduve ciudades y charcos
Playas y desiertos, montañas y llanos
Y la casa tuya, tu calle y tu patio...
Cuando miro el fruto del cerebro humano
Cuando miro el bueno tan lejos del malo
CUANDO MIRO EL FONDO DE TUS OJOS CLAROS
Nocturno a la alquimia de mis sueños
ResponderEliminarYo sé dónde apareces diariamente,
conozco el sitio exacto
y la hora precisa
en que tu rostro enciende su hermosura.
Aprendí de memoria
tu órbita celeste,
el instante glorioso
en que brillas más cerca de mis ojos
y también el momento
en que huyendo me robas tu semblante.
Elias Nandino